CONTINUACION DE LA
SECCIÓN LXXXVI (86)
Quisiera recordar a los seguidores de este
blog, que estos estudios están hecho bajo la perspectiva de un
estudio histórico. Con sus acontecimiento y con una proyección
hacia la venida de Cristo. Así lo dije cuando empece este blog. En el centro de estos estudios están las iglesias, el estado religioso y sus pactos con la iglesia dominante.
Desde la decadencia del Imperio de Romano y el surgimiento del Papado a partir del año 311-590 en su primera fase. Los periodos que abarcan estas profecías son siete.
Apocalipsis 3:1-6 Escribe al ángel de la iglesia en Sardis ó Sardes: El que tiene los sietes espíritus de Dios, y las siete estrellas, dice esto: Yo conozco tus obras, que tienes nombre de que vives, y estas muerto.
La mención de los siete Espíritus. Estos siete espíritus también se describen como siete lamparas (cap. 4:5) y como los sietes ojos del Cordero (cap. 5:6).
La relación de los “siete espíritus” con el Padre y con Cristo, es la fuente de la gracia y de la paz para el cristiano.
Esto implica la presencia del Espíritu Santo. Unas de las explicaciones de este Espíritu Santo esta relacionada con el hombre, ya que sin él el hombre no podría hacer nada.
Cristo nos dio el Consolador (Espíritu Santo) para convencernos de pecado y de juicio. A través de él obtenemos dones por medio de los cuales obra en los seres humanos (1º Cor. 12:4-11; cf. Apoc. 3:1).
El comiendo de este mensaje es duro, esta lleno de reprensiones. El pecado de la hipocresía y las reprensiones mereció la condenación más severa de Jesús contra los dirigentes religiosos.
Notemos que Jesús hizo lo mismo contra los dirigentes de su tiempo (Mat. 23:13-33). Acabamos de deja a la iglesia de Tiatira en su desarrollo como una religión de estado, aunque hay hombres y mujeres que son fieles a Dios.
En un doble sentido se refiere a los dos periodos de la historia. El primer periodo los de Sardis, en tiempos de Juan estaban estaban seguros dentro de sus murallas, como para irse a dormir “si no estas en vela” [sino despiertas] vendré como ladrón.
Como los periodos son seguidos, esto quiere decir que parte de la amonestación recae sobre la iglesia anterior y posterior.
El segundo periodo corresponde entre los años 1.517- 1755 fue cuando Lutero clavo las noventa tesis.
Este mensaje aplicado a Sardis, puede considerarse como dirigido al periodo de la iglesia que existió hacia fines de la época de la reforma 1.517-1755 d.C.
El mensaje que se envía a cada una de las siete “iglesias” se aplicará específicamente a la iglesia cristiana en un determinado tiempo de la historia (CBA t. 7. p. 780).
MARANATA.
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